Tomando el último mes del año con calma

Comienzas a correr y sin darte cuenta, te encuentras apresurado en todas partes. Este efecto parece intensificarse especialmente en estas fechas. El año está por terminar y de repente, todo lo que quedó pendiente se vuelve urgente. Queremos cerrar esos capítulos, deseamos iniciar el próximo año sin cargas ni pendientes.

Sin embargo, te invito a tomártelo con calma. No te obsesiones con la lista interminable de tareas por hacer, porque cuando te apresuras, corres el riesgo de perder de vista lo que realmente importa. No dejes que este último mes del año se convierta en un tormento de estrés, pesar o tristeza; no permitas que lo negativo se apodere de ti.

Recuerda que para cada problema hay una solución. Tómate un momento para respirar, para dejar de presionarte. En este último mes del año, aprovecha para agradecer por todo lo que tienes y por el largo camino que has recorrido para llegar hasta aquí.

Hoy estás vivo, con un cuerpo maravilloso que te permite disfrutar de la vida y de tus seres queridos. Eres capaz de saborear las pequeñas alegrías que te regalas de vez en cuando, y tienes la inteligencia suficiente para reconocer qué es lo mejor para ti.

Este último mes del año es ideal para compartir con tu familia, amigos, pareja, colegas; para expresarles cuánto los aprecias, celebrar su crecimiento y brindarles una sonrisa que les ayude a cerrar el año con gratitud.

Así que, en este último mes del año, tómate la vida con calma y regálate un abrazo.